La ciudad de Erlangen lleva un año utilizando sensores digitales para proteger sus árboles urbanos de la sequía. Los sensores de humedad miden la humedad del suelo y transmiten los datos a un gemelo digital del árbol. Esto permite determinar con precisión las necesidades reales de riego de cada árbol, ahorrando agua y distancias de desplazamiento. El sistema ayuda así a minimizar el estrés por sequía de los árboles. Debido a los resultados positivos, este proyecto se ha ampliado y utilizado en otras ciudades como Bamberg y Berlín para promover el cuidado sostenible de los árboles urbanos.